lunes, 18 de diciembre de 2017

Leonardo

De Leonardo me alejé, porque si había alguien que tenía la capacidad de hacerme perder la conciencia era él ¿por qué? no sé, él estaba muy loco y yo era más un ente que se rendía a sus palabras que una persona.

Con él viví en poco tiempo experiencias que sin duda alguna jamás olvidaré; él es todo lo opuesto a mí, arriesgado, osado y tenía la capacidad de inyectarme esa dosis de peligro y locura que yo necesitaba de vez en cuando para sentirme viva y que desde el momento en que decidí alejarme de él desapareció. Me volví solitaria y hasta sombría y lo único que sé es que si en éste momento lo tuviera cerca, no me sentiría tan muerta como me siento en éste momento.

lunes, 4 de diciembre de 2017

Fotografías

Las fotografías son una herramienta que nos permite atesorar recuerdos, es la mejor forma que tenemos de revivir sentimientos, emociones y momentos.

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Instagram: @LaMoraAna
Yo tengo muchísimas fotos, unas vergonzosas, otras que sin duda traen consigo recuerdos que me llenan de alegría y otras de nostalgia; también tengo unas un tanto "subidas de tono" ¡Ay, esas fotos!, por esas fotos he reído montón, porque me han catalogado de "puta", "vulgar" y "fácil", cuando en realidad  soy tímida aunque no parezca e incluso me puedo catalogar como una persona solitaria. Juzgar a la ligera es fácil, pero ver las cosas sin morbo sí que cuesta, una foto con media teta pelada no me hace puta y una con falda larga y trenzas no me hace santa.

Igual seguiré tomando fotos de lo que se me dé la gana, porque finalmente a lo que decido hacerle una captura, es un pequeño reflejo de como he decidido ver éste mundo que está lleno de odios y carece de tanto amor y paz, además lo que hago no jode a nadie. Así que mejor relájese y si se escandaliza y va lanzando palabras venenosas cuando ve una foto donde hay más piel que ropa o cuando lee un texto que incluye un hijueputazo, déjeme decirle que el problema es usted que carece de tolerancia y respeto por los demás; no yo que vivo libre y sin temor a las etiquetas que me quieran poner.

Adiós miedo

Él no es mi felicidad, pero sí que se parece a eso; me hace sonreír, me complementa, me deja ser como soy sin juzgarme, me acompaña y me da su mano cuando siento que no puedo más, es mi cómplice de sueños y aventuras. No es mi todo, no dependo de él, pero a su lado me siento mejor y amo esa sensación.

Puedo pasar horas y horas hablando con él, podemos hablar de las cosas más tontas y de las más serias, con él todo es como mágico y por ahora lo único que sé es que con él he olvidado lo tortuoso que puede llegar a ser el simple hecho de querer a alguien.

Ricardo

Agnes Cecile, acuarelas del acontecer mundano
.Necesito no pensarlo, no verlo, no sentirlo, no oírlo; necesito que muera en mi mente, necesito no congelarme cuando me mira y me habla, necesito no sentir nada, necesito apagar lo que sea que él encendió en mí; porque así, como estoy, siento que me estoy enloqueciendo, siento que me ahogo cuando lo veo y no lo tengo, siento que muero por sus labios y aún más por sus caricias. Pero también siento que él no se da cuenta y si lo hace, disfruta de verme así, siento que le hace feliz saber que despierta esa sensación de desespero en mí, sospecho que le sube el ego y lo puedo evidenciar cuando me sonríe con esa cara de “sé que mueres por mí”, por eso me dice “mi amor”, como por compasión o por perversidad, porque es como si él disfrutara del espectáculo de mi perdición.

Y lo peor, todo es culpa de una noche de licor, de sus ojos, sus besos y caricias, porque finalmente por una noche dejó de ser platónico para ser real, pero no sé que es peor, si haberlo tenido y querer más y no tenerlo o mejor haberme quedado con el idilio mental que me producía y aún me produce el pensar en él

miércoles, 8 de noviembre de 2017

Pajazo Mental

Fuente: https://www.flickr.com/photos/waese/8250419071 



No sé nada de la vida, no sé nada del amor, no sé nada de absolutamente nada. Sólo sé que camino porque veo caminar, no sé si estoy viva o muerta porque hace mucho no sé diferenciar la realidad de la fantasía.

martes, 7 de noviembre de 2017

Pajazo mental

No te amo, de hecho no sé si te quiero, sé que me gustas, a ratos, porque hay momentos en los que simplemente olvido tu existencia. Eres algo medio platónico, porque después de tenerte el encanto se esfumó un poco. Así funciona todo en la vida, una vez obtienes lo que tanto anhelaste, el interés se va poco a poco.

Es tu culpa

Juro que no quería quererte, porque sabía que eso solo traería consigo sufrimiento, pero no lo pude controlar, empecé a sentir cada vez más nervios cuando te veía, cuando me hablabas me perdía en el sonido de tu voz, cuando me tocabas sentía que me derretía y cuando soñaba contigo despertaba con una estúpida sonrisa pintada en mi cara; no es mi culpa, es culpa de tu encanto, tu sonrisa y tus ojos.

Depresión

No sabía por donde empezar, estaba perdida en medio de la nada, sin norte ni sur, sin tener ni la más remota idea acerca de qué camino tomar y que hacer con su vida; se sentía tan triste, que no le encontraba valor y sentido a las cosas que la rodeaban. Sentirse así se estaba volviendo parte de su día a día  y eso la mortificaba aún más, porque no sabía qué hacer para no sentir esa sensación de vacío que la atormentaba.

Entender qué pasa por la cabeza es muy complejo y decir "relájese y sonríale a la vida" es fácil, pero ejecutarlo no siempre resulta tan sencillo, estar triste o deprimido no es una elección, a veces es una sensación que llega sin previo aviso y se instala en nosotros por horas, días o semanas; no todos nos entristecemos por las mismas cosas y la duración de una "crisis" no es igual en todas las personas; pero la realidad es que la depresión existe y es un trastorno que no se trata con facilidad, es algo que por momentos logra absorber por completo y que lleva a pensar que nada tiene sentido, que es mejor irse en medio de un sueño profundo y dejar de sufrir.

No siempre se sufre porque se quiera, a veces se sufre porque así lo siente la mente y el corazón y criticar a alguien por tener una crisis no es más que una clara muestra de ignorancia, porque la depresión no es un juego, es algo serio.

Sola

Me sentía tan sola, tan triste y vacía; aunque siempre hablaba de disfrutar de la soledad, me estaba costando bastante aplicar el discurso a mi vida. Quería salir a cine con alguien, quería importarle a alguien que no fueran mis papás o mis hermanas, quería romance, quería hacer planes con alguien, pero no había nadie, estaba sola desde hace mucho y eso ya me estaba jodiendo cada día más. Creo que sonreía de mentiras y envidiaba a los que tenían con quien salir, pelear y compartir.

¡Me jodieron!, los que estuvieron antes me volvieron desconfiada, fría y más complicada de lo que ya era, quería amar y no tenía a quien, quería sentir algo y no tenía quien me hiciera sentir. Entré en una absurda rutina de imaginarme feliz con alguien y después deprimirme porque de verdad no había con quién, la soledad me estaba pegando durísimo y lo único que hacía era recordar cuando en algún momento tuve a ese alguien a mi lado y huí por miedo a querer y sufrir.

Yo sola me condené a esa sensación tan horrible de sentir que soy invisible.

viernes, 27 de octubre de 2017

Mi trabajo

En un trabajo como el mío hay dos opciones; o aprendes a vivir cada segundo de tu vida al máximo o concluyes que nada vale la pena, porque al final todos terminamos igual, muertos. Trabajar con la muerte es algo extraño y que jamás pensé hacer, pero nuevamente me estoy demostrando a mí misma que los miedos están en la mente y que somos nosotros mismos quienes podemos hacerlos desaparecer.

Si, acá estoy, rodeada de muertos, ataúdes y personas llorando y lamentando la pérdida de su ser querido, vaya uno a saber si en vida le hicieron saber que lo querían.

"Iluminada"

No sé si era la necesidad de aferrarme a algo que no fuera ajeno, no sé si era que de verdad estaba dispuesta a hacer un cambio en mi vida, pero desde el momento en que decidí ver el vaso medio lleno y no medio vacío, sentí que de alguna forma algo cambió en mí.

Quizás para el que me conocía era raro escucharme hablar de tratar de estar tranquilo, en paz, buscar el equilibrio y tratar de ser luz y no oscuridad; empecé a tratar de mediar en conflictos, que aunque parecían pequeños, si no se trataban a tiempo, podían convertirse en algo mayor. Al final, creo que ese debe ser parte de nuestro propósito en el mundo, tratar de dar luz, de guiar y si sentimos que estamos opacos y sin luz, buscar la forma de recargarnos de energía, pero nunca intentar apagar u opacar al prójimo.

Sin embargo y por más que he tratado de bajarle tres puntos a la neura, tengo momentos en los que mi ser iluminado huye y queda lo visceral de una persona que se emputa, pero ahí voy, intentando hacer de mí, una mejor versión cada día.

Pajazo mental

No, no me importas o al menos eso intento creer. Trato de fingir que no sentí que llegaste y trato de borrar de mi cara esa estúpida sonrisa que se pinta a veces con tan solo escucharte; trato de ignorar tu existencia, porque sé que tú sin el más mínimo esfuerzo logras ignorar que existo.

martes, 24 de octubre de 2017

Sin color.

Otra vez estoy haciendo mi mayor esfuerzo por huir, porque definitivamente los temas sentimentales no son lo mío y el problema no son los demás, soy yo que no cambio mi filtro y siempre termino enredada con los menos indicados y aunque no tengo ni idea de como definir al indicado, estoy segura de que éste personaje tampoco es.

Intenté entenderlo, intenté comprender sus conflictos internos y solo terminé envuelta en pensamientos que ni sé como describir; lidié con sus ataques de mal humor y disfruté de sus escasas sonrisas. Le traté dar un poco de mi positivismo y a cambio recibí un carga emocional tan fuerte que a veces siento que me desmorona.

Así fue como terminé detrás de un hombre sin colores, un hombre que todo lo ve en escala de grises, mientras yo con esfuerzo trato de ver y darle color a todo, un hombre que en definitiva da más sombra que luz y más frío que calor.

lunes, 1 de mayo de 2017

La ballena, la Internet y la adolescencia.

¡Jóvenes internados en el mundo virtual terminan matándose, por seguir las instrucciones del juego de la ballena azul!, esto es absurdo y no tiene lógica. En el mundo, porque es una problemática social a nivel mundial, están preocupados porque los jóvenes han tomado la decisión de entrar en un juego en el que deben cumplir con diferentes tipos de retos, entre los cuales está lacerarse y finalmente acabar con su vida.

Yo, que no soy la más joven, pero tampoco una vieja, tengo 23 años, he estado pensando en éste tema y la verdad no le encuentro sentido a lo que está pasando. ¿Qué lleva a éstas personas a tomar la decisión de acabar con su vida? es quizás la pregunta que más ronda por mi cabeza. No sé si es un tema generacional, pero los que  están entrando o atravesando la adolescencia son muy débiles de mente o les falta algo en su sistema. ¿Cómo es que se dejan llevar por alguien o algo que ni siquiera conocen?.

Las modas y retos virtuales están llevando a las personas a cometer cada día estupideces más grandes ¿qué ganan con eso?, porque el que decide acabar con su vida se muere y ya, pero ¿y los que quedan?, porque quedan familias destruidas, padres llenos de dolor que no logran entender qué pasó; porque muchos de los que han entrado en el juego y han terminado con su vida, son personas que aparentemente tenían una vida normal y digo normal, porque la vida perfecta no existe.

Esto no es culpa del bullying o de vivir en hogares disfuncionales, porque éstas problemáticas han existido siempre, yo sufrí de bullying  y aquí estoy, crecí con padres separados y aquí estoy. Entonces viéndolo desde este punto de vista ¿qué le pasa a los adolescentes? ¿se ha perdido tanto en éste mundo, que hasta el valor y el amor por la vida se fue al carajo y terminamos matándonos porque sí, porque no y porque tal vez?, es notorio que el respeto, el amor, el carácter y la capacidad de analizar para tomar decisiones se perdió y que por lo visto el panorama no tiende a mejorar.


sábado, 22 de abril de 2017

Camilo, parte 1


Camilo es maravilloso, no dejarse llevar a la hora de escribir pensando en él es imposible. Se fijó en mí cuando mi mundo era medio caótico. Además, me conoció cuando era una adolescente medio rebelde, caprichosa, mala para las matemáticas y contestona con sus colegas, los demás profesores; cuando me volvió a ver, aunque ya estaba más calmada y casi superada la época de rebeldía, ahora yo era más dudas e inseguridades que persona y sin embargo, lo que recibí de él fue siempre una sonrisa sincera, un consejo respetuoso y quizás las caricias y besos más dulces y sensuales que he recibido.

Pero como yo soy la persona más descachada[1] para tomar decisiones, se me ocurrió la ingeniosa idea de escapar, nunca le pregunté qué quería de mí o qué esperaba y aunque las señales eran claras, para mí en ese momento no lo eran, así que simplemente hice suposiciones de las cuales hoy me arrepiento y me fui.

Por ahora solo me queda esperar a que vuelva de su largo viaje, que pase el tiempo rápido para volver a verlo, para sentirlo y si es posible, para ésta vez vivir lo que tenga que vivir sin salir corriendo, sin darle espacio a las estúpidas interrogantes que ya una vez me alejaron de él.

Y por si acaso no, no estoy loca, él sabe de mis negras intenciones y creo que los dos estamos esperando lo mismo o por lo menos eso supongo yo.



[1] Hace referencia a una persona que toma decisiones erradas, equivocadas, mejor dicho que mete la pata.

Soñé

Ahí estábamos nuevamente, tomando cerveza como siempre solíamos hacerlo y fumándonos unas hojas para relajarnos; hablábamos de él, de mí, de las suyas y de los míos y sin querer terminamos creando un nuevo momento, un nuevo recuerdo, un nuevo capítulo.

Muchas risas, algo de nostalgia y mucho deseo. El clima, el alcohol y el humo de nuevo hicieron de las suyas, así que otra vez nos perdimos del mundo, jugamos con fuego y nos quemamos. ¿la diferencia?, hoy hubo un te quiero y más caricias que de costumbre. Hoy no desperté ansiosa por el sueño, hoy desperté extrañándolo como nunca.

viernes, 24 de febrero de 2017

¿Pequeña y débil?

Siendo tan pequeña y frágil se aferró a la vida y mientras nosotros sentíamos que la vida se nos iba al piso, ella sacaba fuerzas para enfrentarse a lo que venía; con tan sólo horas de vida nos demostró que era capaz de enfrentarse a todo y que fragilidad no es sinónimo de debilidad.

Cuando nuestra fe fue puesta a prueba, entendimos que nada lo logramos en nuestras propias fuerzas y que a veces solo queda respirar profundo, entregar todo a ese ser superior y esperar para ver que pasará, porque ya nada depende de nosotros. 

Ahora ella es un milagro de vida, es valiente, fuerte, hermosa y sin duda alguna, un ejemplo de fortaleza que me tiene total y completamente llena de luz.