Dicen que despedirse cuando no quieres hacerlo es doloroso y sí, lo es, es quizás la razón por la cual estoy acá, escribiendo estas letras; pienso en nuestra despedida y siento un nudo enorme y asfixiante en la garganta. Es porque no quiero que te vayas, pero entiendo que debes hacerlo.
Imagino que la vida y el amor es eso, querer y entender, aunque duela. Siempre detrás de la coraza que procuro mantener, está la idealista que ama e imagina una vida juntos por mucho tiempo, pero no es así; el tiempo es relativo, así que para mí, nos falta y mucho, pero para la vida ya fue suficiente. Amarte ha sido un regalo, un privilegio y un aprendizaje enorme; tu compañía siempre fue un aliciente y un lugar seguro, pero a mí no me alcanzó para ser exactamente lo mismo para ti.
Soy cursi y tú no, por eso yo escribo estas palabras, mientras tú guardas silencio viendo el celular y buscando vuelos para irte.
Creo que nos sobró amor y nos faltó suerte, la vida es demasiado misteriosa y avanza de manera que casi nunca entendemos, miro tan solo 2 meses atrás y éramos felices disfrutándonos mutuamente y haciendo planes. Regreso a este instante y veo que todo se esfumó y no fue nuestra culpa, nos arrebataron la paz y la estabilidad por la que tanto trabajamos, no aguantamos tanto voltaje y bueno, así quedamos.
Tú tienes más experiencia con las despedidas, quizás por eso siento que soy una despedida más para ti, no sé qué tan lamentable, tampoco lo voy a saber jamás.
Ay mi amor, amor que me rescató y me acompañó por tanto, amor que recordaré siempre con nostalgia y felicidad, siempre desearé que estés bien, que encuentres paz, que seas feliz y que vivas como quieres vivir, con tranquilidad y en el mar, ese que tanto extrañas.
Aún no sé cuando te irás, pero sé que te irás y como me conozco, sé que todo esto no te lo podré decir mirándote a los ojos, así que como siempre, es mejor escribirlo que decirlo, así me evito las lágrimas viendo tus ojitos cafés.
Gracias por tus enseñanzas, por tus reflexiones de vida, por tus recetas que memoricé al pie de la letra, por tus conciertos, tus chistes crueles, tus largas conversaciones explicándome todo sobre ovnis y el universo, gracias por ese hogar que tuvimos por un tiempo, gracias por apoyarme en la adopción de Zeus y dejarme ese hermoso regalo, aunque sé que el amaría que lo llevaras contigo (siempre te prefirió a ti).